Cerramos nuestro recorrido por la interesante arquitectura civil de Valdepeñas, donde disfrutamos de un hotel de cuatro estrellas en Castilla-La Mancha, con las visitas a la Casa del Licenciado Castellanos y los curiosos Baños de la Venta del Cura Rabadán y los Baños de El Peral. Y es que la conocida como Ciudad del Vino, por su indudable relación con la DOP a la que da nombre, tiene mucho que ofrecer a quien se acerca a conocerla.
Antes ya hemos estado, no muy lejos de nuestro hotel en Valdepeñas, en el Molino de Gregorio Prieto, el molino de viento más grande del mundo, que está dedicado a albergar la obra del insigne pintor vinculado a la Generación del 27; y en la Plaza de España, con sus pintorescas fachadas pintadas de azul y blanco y donde se encuentran la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y el Ayuntamiento, ubicado en parte del antiguo palacio del Marqués de Santa Cruz.
También en el Museo Municipal, donde además de la belleza del inmueble podemos admirar una importante colección de arte contemporáneo; en la Casa de los Vasco, casa solariega del siglo XVII de patio rectangular y amplia fachada, ligada a la nobleza; y en el edificio modernista que hoy es sede de la Escuela Municipal de Música y Danza.
En esta ocasión dejamos nuestro cómodo alojamiento en Valdepeñas, a la Casa del Licenciado Castellanos. El edificio donde ahora está el Centro Integral de Formación e Innovación fue la antigua casa de la familia que le da nombre. El actual inmueble fue construido alrededor de 1893.94, sirviendo para multitud de usos diferentes durante buena parte del siglo XX.
Cuenta con patio central con una bonita fuente en el centro, dos plantas, torreón, capilla con cripta y cueva-bodega. La última rehabilitación ha sacado a la luz los antiguos estucados del patio y de las escaleras de acceso a la planta superior, a la vez que recuperó para Salón de Actos el espacio que antes ocupara la Capilla del Cristo de Burgos.
Tras descansar un ratito en nuestro hotel para toda la familia en Valdepeñas, nos vamos a acercar hasta el paraje conocido como El Peral para conocer las curiosas construcciones que conforman los Baños del Peral y los Baños de la Venta del Cura Rabadán. Unas obras de carácter hidráulico que, a través de pantallas interactivas y paneles, nos permite profundizar en los conocimientos sobre el ciclo del agua, sus usos e historia en una comarca que, por su geografía vinculada al vulcanismo, otorgó a sus aguas propiedades mineromedicinales.
Entre otras cosas, allí veremos tres piscinas de la que fuera Casa de Baños. El baño de las mujeres estaba en la conocida como ‘El Arca’, donde brota el manantial de aguas agrias. Las mujeres que iban con niños se bañaban en la central, denominada ‘La Esperanza’. Y para los hombres estaba reservada la tercera piscina, el baño de San Francisco.
Finalmente, llegada la hora de regresar a nuestro alojamiento en Castilla La Mancha, nos despedimos en el antiguo vaso de aguas ferruginosas de la Casa del Cura Rabadán, construido alrededor de los siglos XVIII y XIX y recuperado en 2019. Está localizado en lo que fuera una antigua casa de postas dedicada a dar servicios de cambio de caballerías y asignación de postillones para los correos, viajeros o ganado, y que estuvo rodeada de una zona de explotación agrícola que también aprovechaba el agua almacenada.
Finalmente, si nos quedamos con ganas de un poco más podemos acercarnos al Museo del Vino para conocer toda la tradición, economía y cultura que se generan alrededor del cultivo de la vid; o darnos un paseo por la localidad siguiendo la denominada Ruta de las Esculturas. Tres recorridos diferenciados que nos llevarán por la universal obra de Miguel de Cervantes, el Ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, por algunos de los momentos históricos que han marcado el devenir de los vecinos de la localidad y por la vida y obra de algunos valdepeñeros ilustres.
